Los procedimientos realizados con la tecnología láser ya han sido probados satisfactoriamente para tratar enfermedades del tracto genital femenino y para el manejo de temas estéticos en esta zona. Esta tecnología ofrece muchos beneficios comparada con otros métodos tradicionales, ya que permite que se empleen procesos menos invasivos y con cortos tiempos de recuperación.
• Tratamiento de la incontinencia urinaria leve:
Procedimiento ambulatorio que mejora la pérdida de orina producida por esfuerzos físicos. Está indicado en pacientes que no se consideran buenas candidatas para manejo quirúrgico, bien sea porque no cumplen criterios médicos para ser llevadas a cirugía o porque su condición médica es riesgosa en ese momento.
• Síndrome urogenital asociado a la menopausia:
Proceso no quirúrgico utilizado para mejorar síntomas de resequedad vaginal, estrechez de la vagina y dolor durante la relación sexual en esta época de la vida.
• Tensado vaginal:
El láser aplicado en las paredes vaginales ayuda además a estrechar ligeramente la vagina y aumentar a la vez la hidratación y elasticidad de las paredes vaginales, lo cual se traduce en mayor satisfacción durante las relaciones sexuales tanto para la paciente como para su pareja.
• Remoción de lesiones producidas por el Virus del Papiloma Humano y otras lesiones benignas de la vulva, la vagina y el cuello uterino:
Con este procedimiento se logran vaporizar las lesiones producidas por el virus de papiloma humano y las verrugas genitales. Además se pueden tratar lesiones de los genitales externos e internos en forma ambulatoria y con anestesia local en algunos casos seleccionados.
